Contrato a media vuelta

Y si le doy la vuelta al mundo, y le propongo un trato del revés por donde nunca imaginó, por donde siempre soñó, pero nunca se atrevió a probar, por donde siempre buscó una vuelta de tuerca al final, donde rompió a llorar por sentimientos placidos y enamorados, por ahí, justo y en ese preciso lugar, quiero al mundo en todo su esplendor, donde nada ni nadie, me va a decir lo que tengo que mirar y porqué... y entonces, lo observo, me recreo y me gusta, como tú, ese ángel que amo por encima del mundo.

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