Mi condena
Mi condena
es no tenerte,
no besarte
con la luna llena,
no mover mis labios
al ritmo de tu boca.
es no tenerte,
no besarte
con la luna llena,
no mover mis labios
al ritmo de tu boca.
Mi pecado
es ansiarte
amiga mía,
no poder recrearme
en tus abrazos sinceros
y acariciar la simpleza
de tenerte.
es ansiarte
amiga mía,
no poder recrearme
en tus abrazos sinceros
y acariciar la simpleza
de tenerte.
Mi castigo
es no amar
la completa belleza
de bailar un segundo
sin moverme de tu lado.
es no amar
la completa belleza
de bailar un segundo
sin moverme de tu lado.
Mi pena
es no poder andar
sin que nos tiren las fuerzas
donde nadie llegó,
con el aire, el silencio
y tu sonrisa, por testigo.
es no poder andar
sin que nos tiren las fuerzas
donde nadie llegó,
con el aire, el silencio
y tu sonrisa, por testigo.