Aburrimiento
Me aburren
los mastuerzos que leen
y no evocan
mas que púlpitos
para sus palabras
y enjundia para su boca.
los mastuerzos que leen
y no evocan
mas que púlpitos
para sus palabras
y enjundia para su boca.
Me divierte
que el sillón de mi despacho
dé vueltas,
tanto como que la luna
baile con la noche
y la marea
registre un tango
con la primera ola.
Me quiero tanto
que me pierdo
con lo que amo,
y me quedo en silencio
con mis amigos callados,
así soy yo
y así te lo he contado.
que el sillón de mi despacho
dé vueltas,
tanto como que la luna
baile con la noche
y la marea
registre un tango
con la primera ola.
Me quiero tanto
que me pierdo
con lo que amo,
y me quedo en silencio
con mis amigos callados,
así soy yo
y así te lo he contado.