Si te vienes
Si te vienes y no te quedas,
te prometo un hueco, tan profundo como el que las águilas encuentran en eso que
no puedes hacer, como el que los delfines oyen y los murciélagos ven, cuando tú
eres un ave torpe y sin ganas.
Si te vienes, no te prometo nada, me canso de estar, donde mi cuerpo y mi mente apenas quiere, es un rollo me siento obligado, desahuciado y perdido, si estoy donde no deseo, y mi deseo es cada vez tan minúsculo como mis fuerzas. Soy poderoso en ideas sin temor a narcisismos, te saco un sable de la roca mas problemática, tipo Merlín, te hago un perro de un globo desinflado, pero no me pidas que te saque el aire de mi cuerpo si no tengo ganas de soplar.
La edad es ese producto reciproco a la fuerza que une la meta de una maratón al principio de la misma, no necesito el furor del kilómetro cuarenta y dos, prefiero el uno con la intensidad de un tango suave a juego de rodillas, muslos y el lugar mas recóndito donde se halla ese ser que vive en ti.
Si te vienes y no te quedas, me dejo llevar, si no pienso hasta me sorprendo y aun me puedes guiar mas lejos, me quedo volátil, como un suspiro que aspira a correr tan lejos como lo quieras hacer vivir.
Si te vienes, no te prometo nada, me canso de estar, donde mi cuerpo y mi mente apenas quiere, es un rollo me siento obligado, desahuciado y perdido, si estoy donde no deseo, y mi deseo es cada vez tan minúsculo como mis fuerzas. Soy poderoso en ideas sin temor a narcisismos, te saco un sable de la roca mas problemática, tipo Merlín, te hago un perro de un globo desinflado, pero no me pidas que te saque el aire de mi cuerpo si no tengo ganas de soplar.
La edad es ese producto reciproco a la fuerza que une la meta de una maratón al principio de la misma, no necesito el furor del kilómetro cuarenta y dos, prefiero el uno con la intensidad de un tango suave a juego de rodillas, muslos y el lugar mas recóndito donde se halla ese ser que vive en ti.
Si te vienes y no te quedas, me dejo llevar, si no pienso hasta me sorprendo y aun me puedes guiar mas lejos, me quedo volátil, como un suspiro que aspira a correr tan lejos como lo quieras hacer vivir.