Toda mi vida empieza y acaba en ti

No temas, ya me acuesto, tenía ganas de hablar contigo, solo fue eso, sé que no estás conmigo, pero irme a dormir sin ti, tiene eso, no verte como tatuaje de mi piel, no desembarazarte de la ropa que te cubre durante el día, no ser el bombero del fuego de tu cuerpo, tiene esas cosas, que te echo de menos, que te querría entre mis sabanas, que te querría desnuda, con la piel que pinta la mía, las noches de luna llena, aquellas que el balcón nos lleva lejos, muy lejos, justo en la calle que reside la vida, cuando se queda todo en silencio, y tu solo gritas en mi oído, con las ganas de deshacer tu cuerpo en el mío, de hacerte mil piezas de puzzle para jugar con el mío, cuando me sacas la sonrisa y sin querer me dejas inerte como un cuerpo en otro planeta, en ese con el que casi nadie ha jugado y en ese instante, con mis dedos entrelazados, nos perdemos, te cojo y nos vamos y solo la noche se viene con nosotros, solo la luna babea de envidia, porque estoy dentro de tu cuerpo, porque tu sexo huele a mí y tu sombra es la que llevo reflejada como un espejo entre mi ombligo y mis pechos, con tus senos cubriéndolo todo, como el alma que me hace respirar para decirte al oído lo mucho que te quiero, porque toda mi vida empieza y acaba en ti.