Cierra los ojos

Cierra los ojos y no pienses...y deja que tus manos se dejen seducir por las líneas de las notas, habla con ellas, tomate un café, mirándole los labios, calentando tus manos sin rubor déjate caer... sin miedo... vive el agua bajo tus brazos, déjate bañar, elimina las neuronas ancladas, mátate por este segundo, hazle un traje a tu medida, con sus ojos, con su cabello, con la caricia que tiras sobre su cuello, intentando llegar al punto que la hace estremecer, provócale un escalofrió, que su piel se estire hasta llegar a ti, se sincero, quiérela como se merece, lentamente, despacio, muy despacio...sabes hacerlo, tu corazón fue creado para ello, que cada latido tenga su nombre, su música... su extraño deseo que te provoca, que te lleva donde deseas.

Cogete a mis manos, déjame las tuyas, que las cosas a las mías, que tus venas sean ese trozo que me falta para llegar a tu orgasmo, al país donde te pierdes conmigo, a las calles donde nunca estuve, y en un grito callado, me dejo arrastrar por ti, donde quieras ir, llévame mi corazón es parte de tu puzzle, es el presente de tu verbo amar, y solo quiero conjugarlo contigo, no quiero mas, no quiero tener dudas de ti, ni de mi, quiero limitar mis horas a tu amor, y sentir hasta donde mis pies dejan de tocar el suelo, para volar a tu lado.