Huiría a tu sexo...

Huiría a tu sexo
con descenso perpetuo,
como perenne residente
del hogar de tu entrepierna.

Alquilaría una sombra
a mis neuronas
donde empieza tu rodilla
y acaba tus ingle.

Residiría sin llave
en el umbral de tu intimidad,
esperando la llegada
de tu intensa humedad
para deshacer mí deseo.

Recrearía mi inocencia
en el parque
de nuestro recreo,
y en la hora oportuna
me abriría hueco
para entrar en ti
hasta donde lo infinito
no tiene aduanas.

Y ahora que llego dentro
no me pidas que retorne,
que me pierda en otro vagón
quiero este,
así lo he decidido,
decídelo tú
y si coincidimos
no me dejes sin tu sexo
el resto de mis días.

Entradas populares