Por algo diferente a una cuerda existencia...

Cuando todo resulta demasiado facil,
cuando acercarse es meterte
hasta decir basta
en la piel del otro,
obligar a que la ultima pregunta
tenga respuesta
y no dejar que el aire
separe nada,
siquiera el mas perfido interrogante
de la tarde crepuscular,
y olvidar todo,
sabe a poco,
dejar que las neuronas
no se pinten
de ese color
que no has elegido
de esa puta realidad
donde no quieres dejar tu rastro,
de esa calle
donde no quieres pasar.

Ahora solo queda evitar
vestirte de otras flores,
llevar otros pantalones
menos comprensibles,
otra camisa
que no sepa a rancio
y con ese lienzo
disparar hacia las horas
que quedan por vivir
a las lejanos desiertos
por descubrir
porque entre la multitud
siempre existe ese punto
donde parar
siempre existe ese idioma
facil de hablar,
siempre existe esa persona
con la que vivir
no sea una cuerda existencia.

Entradas populares