Aun seguimos amando...

Me recreo entre tu pelo
me gusta perderme entre los hilos
que vuelan lejanos
y descender en la calma,
sin perseguir nada,
con el cansado viaje
de una tierna tortuga,
despacio
lento
casi sin sentir,
en otro mundo
ese que creamos los dos
tus dedos y esa sombra azabache.

Y mis ojos cerrados
no saben de otro objeto
que la alfombra
que tus neuronas dibujan,
un lienzo incapaz
de ser pintado,
por el pintor mas preciado,
y mi mente se evade
hasta del frio,
dejo de estar
dejo de ser
me muero por este instante
que en nuestra soledad
comienzo a vivir.

No me dejes despertar
no me indiques otra hora
no crees otro paisaje
que la piel de tu boca
que mis manos dibujan
no dejes que la humedad
de tu saliva
me deje de bañar,
que el deseo de residir
bajo la sombra de tu boca
sea un recuerdo que compartir,
dejame morir en ese soplo de aire,
y mañana siga aqui,
envuelto del perfume
que dibuja ese retazo
que queda tras de ti,
y que los adoquines de la calle
me envidien,
y que las farolas se enciendan,
en esa tarde que se pierde,
que se muere en el horizonte
con ese sol,
que es nuestro espejo
el lienzo perfecto,
donde se dibujan nuestros cuerpos.

Y hoy ha vuelto amanecer,
y entre las sabanas
encuentro tu cuerpo desnudo,
tus pies son el principio
de una larga amistad
entre tu amor y el mio,
ese amor,
que hoy ha despertado
ese amor,
que no quiere jamas
seguir soñando...

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