PasEAr entre SU cuERPO

Y paseaba, a traves de su cuerpo, se cernía a la sombra de la puntilla de su sujetador y descargado de todo apendice al mundanal ruido, solicitaba su cuerpo en el deseo transfuga de ser recompensado por su intimidad, para alejarlo de la angustiosa obviedad de hallarse vivo sin sentido.

Sus pechos pasaron a ser mano de las mías, y sus pezones, siembra de mi lengua, enervada y asolada por el divino placer del deseo que conectaba de su piel hacia mis neuronas, transgrediendo los limites prohibidos, hacia no se que lugar, donde no me importaba vivir otra vez... si es que alguna vez alcance la marea donde me pudiera llevar el lienzo que ahora tocaba.

Y volaba, sin necesidad de ryan, con el bajo precio de callar lo deseado a coste cero, porque mi impulso se compensaba con el suyo, vagaba por su trasero con la misma contraprestacion que lo hacia sus manos sobre el mio, ascendiendo sobre mi espalda e intentado allanar todas las calles de mi cuerpo, y el suyo era un campo de huellas, digno del peor policia, sin testigos, sin sendas preparadas, la imaginacion y el deseo al poder, para reventar cualquier poder, para encumbrarse a ese minusculo precipicio donde todo sabe diferente, donde todo tiene su nombre, donde todo posee la pasión sentida de ser uno, al menos el instante que vivir sea esa cosa llamada vivir (Continuara)