Donde No hABita NADIE...

Aun sin saber escoger

entre lo valido y lo inválido,

queriendo ignorar

todo aquello

que lo superfluo

también ignora,

no consigo hallar fortuna tal

que aniquile

las ganas de marchar.

Marcharme sobre el camino

de vuelta al hogar,

donde resides

donde haces el amor

sin desgana

donde procreas

tanta algarabía

que ni los niños

pueden hacerte callar.

Pues ese lugar persigo,

entre tu sexo y tus pechos,

entre tus ojos

y mi mirada,

entre la luna

y la tierra que paseo

por esos zapatos andrajosos

cansados de trotar

en busca

de no se que parada de metro,

donde tus labios descabalguen

mi lengua se afile

y los cuchillos de mis besos

provoquen tu suspiro

y ese grito

que nos lleve

donde no habita nadie

ni el resto

de los seres humanos.