Ella y tal vez yo...

Un nuevo mes, porque no empezar una nueva vida?, porque no andar sobre neutralidad, y experimentar el sabor de la falta de tabaco?, porque no dejar de esconderse y penetrar donde quieras llegar?, sin miedos, sin tapujos, con el solo velo de la sonrisa, porque no quitarse todo lo que sobra y permanecer inertes en el camino?, al encuentro de quien ha de llegar, sin prisas, sin pausas, con el fin de revolcarse en los adoquines, sin mas misterio que el de hallar lo que buscas, ese tesoro que te haga disfrutar de lo que tu solo no puedes hacer, invertir en su cuenta y que ella permanezca en el mismo punto y en la conjunción de los sentidos, viváis en alquiler hasta que el hostal del amor cierre las puertas.

Embadurnados de terciopelo malva, podáis dejar de hacer lo que el mundo pide que hagáis, y moriros por la inquietud del color del otro amanecer, ese que no permanece, se instala, se recrea y se empobrece, ese que nace de besos, y no de estupidas y engreídas vivencias. Pues allí quiero vivir, en ese lugar, donde la calma del budista sobre la roca, me lleve a meditar con ansias de libertad, de crear, de moverme, aun solo por segundos, donde la mente vacía es digna de volar, como en ese orgasmo que provoca el ascensor hacia ninguna parte…sin pisos que parar, en ascenso continuo con el vértigo del morbo de aspirar donde la pértiga mas esbelta no sabe llegar, y seguir soñando en el vacío, tocar el aire y desprotegerte de la ridícula embestida del tiempo, gente y muertos en vida, desaparecer en constante subida hacia los pezones del deseo, donde no habita mas que el silencio, y sin compañera de viaje, o incluso con ella, poder ver amanecer en ese rincón de tus neuronas, donde la callada sombra de los sentidos siquiera se manifiesta, allá donde solo vives tu y si acaso, ella, en ese punto, quiero encontrarme un día, para saber porque me trajeron a este lugar de sombras y luces, donde muchas veces todo se apaga… por ello sigo viviendo, caminando, embadurnando mi cuerpo y tal vez, el suyo, perdiéndome del todo y de la nada… para moverme en un instante que respire sentido, libertad y ese alma, donde casi nadie vivirá…ella y tal vez yo…