bAlada de amor propio
Ámate,
piensa en ti
y si encuentras
algún otro segundo
hazle un hueco
a ese otro yo,
donde resides,
sin ser
en su cuerpo.
Haz de ti,
una muralla
donde aplacar
los duros inviernos,
donde soportar
los infiernos
de esos ignorantes
sin destino.
Haz de tu vida,
la guarida donde hallar
el dibujo de los sentidos,
donde acariciar
el suave latido
de la lluvia.
Haz de tus días,
la tierra donde pisar
hacia el infinito,
donde amar
hasta la ultima expresión
de tu cuerpo.
Haz del amor,
ese idioma
que no desees
que no sueñes,
que se escriba
en su boca
que se dibuje
entre sus pechos,
que se deshaga
en su cabeza
y grite entre sus piernas.
